jueves, 7 de agosto de 2014

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Cuadernos de viaje. Florencia (I)

¡Vacaciones de verano y viaje a la vista!

Bueno pues una vez pasado esos días en la bella Italia toca hacer recuento de las experiencias y dar algún que otro consejillo sobre aquello que nos podemos encontrar en la ciudad de Florencia.
Piazza de la Republica


Viaje, el cómo llegar
Para llegar a Florencia desde España hay múltiples conexiones en avión hasta el propio aeropuerto de Florencia pero si quieres ahorrar un poco puedes optar por el de Bolonia o el de Pisa, este último es el que escogimos nosotros. Para llegar a Florencia tenemos dos opciones:
  • Tren con la compañía Trenitalia, que tiene una frecuencia de media hora prácticamente. Para ir a Pisa Centrale, que es donde está el tren con destino Florencia, tienes la opción de ir en un pequeño bus desde el aeropuerto o coger otro tren desde ese mismo lugar. No olvides siempre ticar en la estación el ticket del tren que te hayan dado en el bigleteria o hayas comprado en las máquinas automáticas puesto que sino te puede caer una multa si te encuentras con el revisor/a, son unas maquinitas verdes que se encuentran en los mismos andenes.
  • Bus, con Terravision, tienen una frecuencia bastante similar a la del tren, el precio ronda los 9 euros aunque es un poco más lento.
Llegando a Florencia, hay dos estaciones, la del centro es Santa María Novella que nos deja en plena ciudad, a partir de aquí y dependiendo del lugar de donde te alojes, necesitarás bus urbano o no, aunque no es una ciudad demasiado grande y todo lo visitable queda cerca del centro por lo que es probable que el alojamiento escogido también.

Cúpula de Santa María di Fiore
Qué ver
Florencia tiene multitud de obras artísticas que visitar así que puedes pasar días y días y siempre te quedará algo que observar entre sus calles y museos pero si vas con poco tiempo, como nosotros, digamos que en dos días puedes ver aquello más importante aunque también más popular por lo que te puedes encontrar con colas para visitarlos. Vemos nuestra hoja de ruta:




Día 1
Campanario de Giotto se encuentra junto a la misma catedral, forman parte del conjunto monumental. Mejor ir temprano, nosotros entramos poco antes de las 10 y sin problemas, al salir después de unos cientos de escalones (463 exactamente) y vistas de la ciudad, nos encontramos con cola de espera. Allí mismo se puede adquirir la entrada para todo el conjunto por un precio actual de 10 euros, puedes visitar el Baptisterio, La catedral Santa María di Fiore (gratuita y con colas), el Museo de la Opera del Duomo (cerrado por obras, disculpen las molestias... pero no te avisamos antes), la cúpula y las criptas.
Nosotros optamos solo por el campanario porque la cúpula tiene prácticamente las mismas vistas al exterior, aunque nos perdimos su interior de Brunellesci pero había una cola bastante grande aún siendo temprano.
Posteriormente pasamos a visitar la Catedral Santa María di Fiore, se recomienda no ir en tirantas o pantalón corto, sino saquito que te ponen.
El Laoconte, Galleria Ufizzi
En su interior puedes optar por una visita gratuita por parte de los guías que se encuentran, en varios idiomas, entre ellos el español. Un interior grandioso pero sin llegar a ser espectacular, aunque desde lejos se aprecia la obra de la cúpula.
En el mismo interior hay una entrada para las criptas que actualmente se encuentran en excavación y hay varias piezas de origen funerario además de una explicación del aumento de la planta de la catedral y sus pasos a lo largo de la historia.

Antes de llegar a la Galleria Ufizzi y haciendo un poco de tiempo pues teníamos hora a las 12.45h previa reserva sino la espera puede ser un poquito larga, nos encontramos con la Piazza de la Republica y con la Iglesia de Orsanmichele. Ya en Ufizzi está todo muy bien señalizado para que no haya perdida alguna entre aquellos que van en grupo, con o sin reserva. Se dedica perfectamente dos horas para ver la galería e incluso un poco más si te gusta ver todo con mucho detalle. Es un lugar bastante visitado y por tanto con mucho turista de por medio pero se puede ver todo bien. Las salas de pintura están ordenadas cronológicamente y con obras como El Nacimiento de Venus de Botticelli (1484) o con La Anunciación de Da Vinci y tiene un precio de 6,5 (Adultos) a lo que hay que sumar la exposición temporal que te obligan sí o sí por lo que en realidad son 11€. Recuerda que si coges el ticket con reserva el precio será más elevado (sí, debería ser al contrario ¿no?).

Por la tarde optamos por cruzar el río Arno y encaminar nuestros pasos hasta el Palazio Pitti, la Piazza Michelangelo y La iglesia de San Miniato del Monte.
Vistas desde Piazza Michelangelo
Palazio Pitti, data de 1458 y que fue originalmente la residencia urbana de Luca Pitti. Podemos encontrar diferentes áreas que visitar y en la entrada se nos ofrecen dos opciones, visitar Galleria Palatina e Galleria d'Arte Moderna o visitar los jardínes del Boboli y el palacio de la porcelana, ambas rutas por un precio (adulto) de € 8,50. Nosotros optamos por la primera opción, la Galería pues habíamos leído que los jardínes no merecían mucho la pena y estaban mal cuidados... pero para gustos! Así pues la Galería contiene obras de Rafael, Tiziano, Correggio, Rubens colocadas en diferentes estancias de una forma mucho más íntima que un museo aunque da una pequeña sensación de caos, también se pueden ver las estancias reales. He de decir que me impresionaron los techos y sus frescos por el inmenso realismo tanto que parecían esculturas más que pinturas. Esta visita fue una grata sorpresa pues las críticas que leía no siempre eran buenas.
Continuando en esta misma margen y subiendo otros tantos escalones nos vamos a la Basílica de San Miniato del Monte, que cuenta con una fachada de mármol muy sobria y con unas espléndidas vistas de la ciudad, es un lugar visitado pero sin saturar y por tanto se puede estar mucho más tranquilo observando el horizonte. Nosotros nos encontramos además, a los monjes con sus cantos en el interior.
Un poquito más abajo de esta basílica (y pasando previamente para llegar) está la Piazza Michelangelo la cual si que está llena de turistas, ofrece unas magníficas vistas de la ciudad y al atardecer la gente se pelea por hacer la foto más bonita. Allí incluso puedes tomar un refresco con música de ambiente.

Y hasta aquí nuestro primer día, continuaremos en otra entrada.

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